Historia

Un mineral ancestral y esencial, lo consideramos como si fuera un derecho obtenerla, quizás porque es tan esencial para la vida. Sabías que cada célula de tu cuerpo contiene sal?

La sal estaba en uso mucho antes que la historia lo registrara. Desde el principio de los tiempos, los animales han forjado instintivamente caminos hacia las fuentes naturales de sal para satisfacer su necesidad de sal. El hombre antiguo, el cazador, obtenía su sal comiendo carne de animales. Cuando se dedicó a la agricultura y cambió su dieta, descubrió que la sal (tal vez como agua de mar) le daba a sus verduras el mismo sabor salado al que estaba acostumbrado con su carne.

Hace unos 4.700 años, Png-tzao-kan-mu registró más de 40 tipos de sal. El trabajo describió dos métodos de extracción y procesamiento de la sal, que son similares a los métodos que todavía se usan en la actualidad. Sin duda también existieron escritos sobre la sal en las tablillas de arcilla de la antigua Babilonia y en los papiros egipcios. Incluso sin evidencia escrita, podemos estar bastante seguros de que la elaboración de sal y su uso era una característica de la vida en todas las comunidades antiguas. Donde están aisladas del comercio y la tecnología modernos, algunas comunidades aún elaboran sal con los mismos métodos prehistóricos.

Beneficios en la Salud

La sal es esencial para nuestra salud y juega un papel crucial para mantener nuestro cuerpo funcionando correctamente. Cuando hacemos ejercicio, cuando tenemos calor y cuando estamos pasando por cambios fisiológicos, como el embarazo o el envejecimiento, su papel se vuelve aún más fundamental. Lo más importante es que mantiene el equilibrio de nuestros fluidos, que transportan oxígeno y nutrientes por todo el cuerpo. El cuerpo ajusta la cantidad de sal que consumimos dándonos sed cuando necesita diluir la sal. Un cuerpo sano procesa la cantidad justa de sal que necesita y los riñones eliminan el exceso.

Los dos elementos de la sal ? sodio y cloruro? cada uno juega una variedad de papeles cruciales en nuestros cuerpos.

El sodio permite la transmisión de impulsos nerviosos por todo el cuerpo y regula las cargas eléctricas que entran y salen de las células que controlan los procesos del gusto, el olfato y el tacto. También ayuda a que nuestros músculos, incluido el corazón, se contraigan.

El cloruro es la clave para el proceso de digestión. Preserva el equilibrio ácido base en el cuerpo y absorbe potasio. El cloruro también ayuda a la sangre a transportar el dióxido de carbono desde los tejidos respiratorios hasta los pulmones.

Cuando no tenemos suficiente sal, tenemos debilidad muscular y calambres y nuestro cuerpo no puede realizar todas sus funciones vitales.

Pérdida de sal (hiponatremia)

La hiponatremia es una condición que ocurre cuando el sodio en la sangre cae por debajo del rango normal de 135 a 145 mEq/L. En casos severos, los niveles bajos de sodio en el cuerpo pueden provocar calambres musculares, náuseas, vómitos y mareos. Eventualmente, la falta de sal puede provocar shock, coma y muerte.